En esta página te contaremos todo lo que necesitas saber sobre la liposucción y lipoescultura.
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La grasa que se nos acumulada en zonas determinadas del cuerpo, termina habitualmente por provocar irregularidades y desproporciones en nuestra silueta como celulitis, michelines o cartucheras. Por otro lado, el paso del tiempo provoca flacidez de los tejidos faciales, envejeciendo nuestro aspecto.
Se trata de alteraciones estéticas, en mujeres y hombres, que tiene su origen, además de en la edad, en factores como la genética, alimentación, estilo de vida o cambios hormonales. Cuando no pueden tratarse con dieta o ejercicio físico, la opción es recurrir a técnicas de remodelación corporal.
Para la remodelación del cuerpo encontramos actualmente una gran cantidad de opciones, tanto quirúrgicas como no. Entre las técnicas quirúrgicas de alta precisión se encuentran la Lipoescultura y la Lipotransferencia, dos avanzados procedimientos que permiten esculpir el cuerpo evitando las incisiones traumáticas y grandes cicatrices.
La Lipoescultura, junto a la Liposucción, entra en la categoría de técnicas quirúrgicas para el contorno del cuerpo.Es una intervención que permite redefinir distintas áreas corporales a través de la eliminación y el reposicionamiento de las células de grasa. A diferencia de la Liposucción, donde la grasa se aspira y se elimina exclusivamente para obtener una silueta más delgada, la lipoescultura permite una remodelación del perfil del cuerpo a través de rellenar zonas deficitarias, dando armonía a toda la figura.
Es un procedimiento idóneo para eliminar los cúmulos de grasa que no desparecen ni con dieta ni ejercicio, para personas que no tienen un sobrepeso excesivo, pero hay que aclarar que no es un tratamiento para combatir la obesidad ni sustituye a un programa nutricional de pérdida de peso.
La técnica de la Lipoescultura reside en la disolución y posterior extracción de grasa localizada en diferentes partes del cuerpo como brazos, abdomen, nalgas, cartucheras, rodillas, cuello, etc. a través de una fina cánula, succionándola.
La cánula se introduce, conectada a un sistema de aspiración, por debajo de la piel a través de pequeñas incisiones situadas en pliegues naturales como el ombligo o el pliegue del glúteo, para dejar la menor marca posible.
La grasa extraída, una vez tratada, se utiliza para rellenar y dar forma a diversas áreas del cuerpo y la cara. Se inyecta en las regiones a esculpir a través de la inserción de cánulas que permiten una posición realmente precisa.
La intervención dura entre 1 y 3 horas, dependiendo de las zonas a tratar y el volumen de grasa que se deba extraer. Se emplea anestesia local y sedación por lo que el paciente no sufre ningún dolor, realizándose de forma ambulatoria.
Si el paciente se mantiene en el peso y cuida su alimentación, los resultados se pueden considerar definitivos. Además, son visibles desde el primer día, aunque se irán asentando con el tiempo según vaya disminuyendo la inflamación.
Durante el posoperatorio las recomendaciones para el paciente son diferentes para cada fase de la Lipoescultura: en las zonas donde se ha realizado la extracción el paciente deberá llevar una faja de compresión, mientras que en las zonas donde se ha injertado la grasa se recomienda no comprimir.
Durante los días siguientes a la operación lo habitual es presentar inflamación y hematomas, que habrá desaparecido en su totalidad aproximadamente en un mes. La mayoría de las molestias desaparecen con los calmantes y antinflamatorios habituales pasados unos días, y el paciente podrá retomar su actividad normal.
En las siguientes dos semanas se realizarán revisiones médicas para comprobar que la evolución es la adecuada. Se recomienda no realizar ejercicio ni actividad física brusca, así como no exponer al sol las zonas tratadas.
La Lipotranserencia o Lipofiling es una técnica de relleno que permite intervenir en varias partes del cuerpo para modificar el volumen, como la nariz, los labios y las líneas de expresión. El material utilizado para el relleno se toma de algunas áreas del cuerpo del paciente. La diferencia con la Lipoescultura es que no hay una acción real de aspiración de la grasa. La cantidad tomada es la mínima necesaria para cubrir las áreas a tratar.
La grasa extraída del paciente presenta varias características que la convierten en un tejido idóneo para el tratamiento ya que no provoca rechazo al ser de la propia persona y favorece la cicatrización y la formación de colágeno, entre otras ventajas.
Antes de comenzar con la intervención, se deberá conocer la cantidad de tejido adiposo que se necesita para obtener el resultado deseado. Dependiendo de cuanto se necesite, la extracción se realizará de una forma y de una zona u otra. Lo habitual es hacerlo de la zona abdominal, muslos o caderas, que son las que normalmente acumulan más tejido adiposo.
Se trata de una cirugía ambulatoria con anestesia local de una hora de duración aproximadamente.
Si tienes interés en conocer cómo estás técnicas de remodelación corporal pueden ayudarte, ponte en contacto con la clínica Dr. Esteban Sarmentero. Estudiaremos las zonas que te preocupan y cuál es el estado de la piel, para aconsejarte de una manera personalizada a tus particularidades. Las intervenciones quirúrgicas son realizadas en hospitales de prestigio de Madrid, que ofrecen unas condiciones óptimas para la práctica de intervenciones de cirugía estética y plástica.